¿Como afecta la discriminación en la Sociedad?
Discriminar significa diferenciar, distinguir,
separar una cosa de otra. La discriminación es una situación en
la que una persona o
grupo es
tratada de forma desfavorable a causa de prejuicios, generalmente
por pertenecer a una categoría social distinta; debe
distinguirse de la discriminación positiva (que supone
diferenciación y reconocimiento). Entre esas
categorías se encuentran la raza, la orientación
sexual, la religión, el rango
socioeconómico, la edad y la discapacidad.
Existe una amplia legislación contra la
discriminación en materia de
igualdad de
oportunidades de empleo, vivienda y bienes y
servicios.
La mayor parte de los países practican la
discriminación contra extranjeros y otras minorías
dentro de sus fronteras. Esta discriminación puede ser por
razones de religión (como la
existente entre protestantes y católicos o entre
musulmanes y judíos), por razones de raza (como la
política
de apartheid que se practicó en Sudáfrica
entre 1948 y 1992) o por razones de sexo (como
ocurre en muchos países donde las mijeres tienen derechos muy limitados, o la
discriminación a homosexuales). La legislación de
cada país debería ser el medio para combatir la
discriminación, pero con frecuencia son precisamente estas
leyes las que,
de forma activa o pasiva, alientan las prácticas
discriminatorias. Por lo general se ha observado que la
discriminación aumenta de forma considerable en
períodos de recesion económica, en donde la
población vuelca su insatisfacción
sobre otros grupos
étnicos o religiosos considerados como presuntos causantes
de esta situación.
Los esfuerzos internacionales para combatir la
discriminación han sido casi inexistentes hasta la
aprobación de la Carta de las
Naciones Unidas
(ONU) en 1945. Uno
de los objetivos de
este documento era fomentar "el respeto por los
derechos
humanos y las libertades fundamentales de todos los
individuos sin distinción de raza, sexo, idioma o
religión".
La Declaración Universal de los Derechos Humanos,
aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas
en 1948, contiene una amplia afirmación de los derechos humanos,
aunque carece de efecto vinculante sobre los Estados miembros.
Posteriormente la Asamblea General aprobó el Acuerdo sobre
Derechos Civiles
y Políticos (que entró en vigor en 1976),
así como acuerdos específicos sobre
prevención y penalización del genocidio y sobre
eliminación de cualquier forma de discriminación
racial. Estos acuerdos fueron firmados por la gran mayoría
de los países, entre los que no se encontraba Estados Unidos,
aunque en febrero de 1986 el Senado de este país
respaldó la condena de la ONU sobre el
genocidio.
El principal obstáculo a la
protección internacional de los derechos humanos
es el hecho de que la mayoría de los países no
aceptan la intervención en sus asuntos internos, y no
reconocen la discriminación de sus propios ciudadanos. En
cierta medida esta dificultad ha podido ser solventada por
organizaciones
como la Comisión Europea de Derechos Humanos y la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Algunas
organizaciones
independientes, como Amnistía Internacional, trabajan por
la protección de los derechos humanos y contra la
discriminación en todo el mundo.
Amnistía Internacional:
organización no gubernamental humanitaria
de carácter privado, con cobertura internacional, que
lucha de forma imparcial por la liberación de los
prisioneros de conciencia o
lo que es lo mismo, de todas las personas encarceladas o
maltratadas debido a sus creencias políticas o religiosas. Los objetivos
generales de la
organización son hacer respetar la
Declaración Universal de Derechos Humanos, trabajar para
conseguir la liberación de las personas detenidas,
privadas de libertad o
sujetas de cualquier otra forma a la coacción física a causa de
sus creencias, origen étnico, sexo o
lengua
(siempre y cuando estas personas no hayan utilizado ni
defendido la violencia),
oponerse a la encarcelación sin un juicio previo y
defender el derecho a un proceso
justo, y protestar contra el uso de la pena capital o la
tortura, tanto si los sujetos implicados han defendido la
violencia
como si no. Amnistía Internacional recibió el
Premio Nobel de la Paz por "sus esfuerzos por defender la
dignidad humana contra la violencia y
la opresión".
Discriminación en los derechos humanos
Aunque en general significa acción y efecto
de separar o distinguir unas cosas de otras, en Derecho el
término hace referencia al trato de inferioridad dado a
una persona o
grupo de
personas por motivos raciales, religiosos, políticos, de
sexo, de
filiación o ideológicos, entre
otros.
Ha sido tradicional la desigual
consideración de los hijos según fuera su origen
matrimonial o extramatrimonial. Así, los segundos
tenían menos derechos en la herencia de sus
progenitores que los hijos habidos en matrimonio.
También, en el ámbito laboral, es
reseñable el trato discriminatorio que sufren las mujeres,
pues el coste que para las empresas supone
contratar a una mujer, en
especial si está casada, es mayor si se tiene en cuenta
una posible baja por maternidad. Es célebre el caso que en
Francia
protagonizaron hace décadas las auxiliares de vuelo de la
compañía aérea Air France: la
discriminación venía dada, no por la
condición de mujer, sino por
la de ser mujer
casada.
La política oficial de
apartheid fue abolida en la República Sudafricana,
en lo cual tuvo un protagonismo indudable el dirigente de la
población negra Nelson Mandela,
además de las presiones internacionales generalizadas. A
pesar de todo, en los últimos tiempos se han recrudecido
las prácticas racistas o xenófobas en los
países occidentales (skin heads o 'cabezas
rapadas', grupos neonazis,
entre otros), y de una manera alarmante en algunos países
árabes (Argelia, Irán, Egipto), en
éstos ya con serias implicaciones
religiosas.
Las modernas Constituciones prohiben la
discriminación, a partir de la proclamación de la
igualdad de
los ciudadanos ante la Ley. Es
más, uno de los llamados derechos fundamentales es
precisamente la no-discriminación por razón de
nacimiento, sexo, raza o
cualquier condición personal o
social. En la Declaración Universal de los Derechos del
Hombre de 1948
este derecho se encuentra reconocido
expresamente.
No son pocas las legislaciones penales que
consideran delito la
práctica del funcionario público o del particular
que desempeña un servicio
público que deniega a una persona, por
razón de origen, sexo, religión o raza, una
prestación a la que tiene derecho.
Desde otro punto de vista, el Derecho del comercio
utiliza el término discriminación para referirse al
trato desigual que se puede conferir según sea el cliente un
consumidor o un
profesional o proveedor.